• La población con neoplasias malignas presenta mayor riesgo de complicaciones, en parte por la mayor edad en general de estos pacientes (≥ 60 años) y también por los efectos sobre la inmunidad tanto de la enfermedad (mediada por IL-10, TGF-β, VEGF) como de sus tratamientos (corticoides, QT, inmunomoduladores).1,2